martes, 6 de octubre de 2009

Nuevo mes, nueva historia de vida.

Chinchulín hoy presenta la vida de Melisa... Una gran persona...

Melisa (pobre chica) esta poseída por una necesidad insaciable de pija.
Melisa es hija de padres separados, vive en cerca de cinco esquinas. Su mamá está casada en segundas nupcias y tiene 2 hijos con su otra pareja (viven ahí no más en Churruarín). Ella vive con su papá que nunca se volvió a casar aunque siempre anda consiguiendo noviazgos de 1 o 1 y 1/2 años. Sus padres se conocieron militando en el partido comunista, fruto de ese amor nació Melisa. Ella ha sabido aprovechar la biblioteca de su padre y ha leído valiosísimas porquerías como los libros de Pacho O`donnell sobre Guevara de la Serna, los de Romero y Félix Luna sobre el peronismo, etc. Aunque entre toda esa inmensa basura también supo chocar con libros de Rodolfo Walsh.
Durante la secundaria melisa fue presidenta del centro de estudiantes, pertenecía a una agrupación denominada “La cheguevarista”. Ahora estudia comunicación social, cree saber de todo un poco y cree tener herramientas para analizar cualquier fenómeno. Le encanta hablar de política y de cuestiones de Estado aunque desconoce absolutamente de administración pública, de derecho constitucional, análisis institucional, etc. Pero eso no le importa. Ya aprobó antropología 1 de su carrera, ha leído alguna q otra cosa de Foucault, algo de Rosanvallon, Bobbio y Sartori. Además los sábados a la mañana hace un curso en el que ha aprendido mucho sobre Paulo Freire.
Entonces melisa, acérrima lectora de pág12, defensora del "movimiento intelectual" Carta Abierta y fanática del programa de Feimann por encuentro, gusta de dar cátedra a gente que es aún más ignorante que ella.
De esta manera transcurren los días de Melisa, vive en un mundo en el que la izquierda y la derecha se enfrentan abiertamente, la sociedad se moviliza en pos de un modelo de país, las elites despliegan estrategias contra los embates del nacionalismo popular... en definitiva vive en un mundo que no existe, pero que en las colonizadas mentes como la de Melisa es LA REALIDAD.
El día que melisa logre la autodeterminación intelectual, el mundo será un lugar mejo.


Mensaje de Chinchulín a sus lectores: "Cualquier semejanza con la realidad es pura coincidencia, si no me cree agárremela con la mano."

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Chinchulin, ¿no podés pasar para los lectores acérrimos de este blog la información de contacto de Melisa?
Por lo de la impostergable necesidad de pija que tiene, aclaro, no por su militancia de izquierda arrepentida en el neokirchnerismo.

Camila dijo...

Comunicación Social está lleno de Melisas, de esas que empiezan y ya quieren estudiar cine y hacen cursitos de morondanga para tener algo de especial en su grupo de compañeras (todas quieren ser Mónica Gutierrez y una que otra trabaja en un programa de entretenimiento local diciendo los números de tel o sortenado un kilo de helado). Las Melisas en cambio, saben quien pintó los girasoles y por eso íntimamente piensan que sus amigas son más pelotudas que ella. Pero las Melisas son capaces de actos de rebeldía como ser: votar en blanco. Rosanvallon, Bobbio y Sartori no entran en los programas de Com. Social, debo decir.

Camila dijo...

Aclaro porque puede parecer lo contrario: votar en blanco me parece el acto más pelotudo de la democracia representativa. Si de por sí se trata de una democracia que sólo en una ciudad que no existe (porque es perfecta) podría funcionar, votar en blanco en desconformidad con el caos, por una plenitud social que nunca tuvimos es más propio de un naboleti que otra cosa... ¿No?

Ariana Stavroguin dijo...

no tengo nada que opinar.
aun así, saludos.

moncho dijo...

Estimado Grotesco, se lo dije el otro dia. Esta historia me permitio imaginar, y alli la encontre a ella. A Melisa. Y descubri como se viste. Su moda es la de una neozurdita de la internet, de esas que pretenden lograr la revolucion por chat. Tambien llamada moda HIPPIE CHICK. Algunos sostienen que tiene olor a bacalao (concha), pero no yo no soy tan vulgar. Besos en las nalgas